Le salvaron la vida a una gatita con sangre de una perra

El pequeño felino llegó débil a la veterinaria y la médica decidió usar la sangre de su propia perra para transfundir al animal.

Perro y gato, imagen ilustrativa (Foto:iStock)
Perro y gato, imagen ilustrativa (Foto:iStock)

Maureen Franklin llegó a una veterinaria situada en Gateshead, Inglaterra, con su gatita Ellie que pesaba solo 280 gramos. La médica que las recibió fue Helen Spry.

El pequeño felino estaba tan débil debido a la falta de glóbulos rojos que ni siquiera podía mover la cabeza. Ellie estaba al borde de la muerte.

El estado del animal no permitía demorarse en buscar un donante, tenía que recibir una transfusión urgente. Acá es donde se volvió sumamente valiosa la intervención de Helen Spry y de su perra Bella.

Ellie, la gatita que fue transfundida con la sangre de Bella, una perra.
Ellie, la gatita que fue transfundida con la sangre de Bella, una perra.

La veterinaria decidió practicar una xenotransfusión, es decir, una transfusión de sangre entre animales de distinta especie. Bella fue la donante para Ellie y así pudieron salvarle la vida momentáneamente, ya que el felino necesitó, después del momento de urgencia, sangre de un gato sano para poder mejorar.

A través de la ONG VetsNow, lograron hallar un gato donante y así, Ellie se recupera de manera satisfactoria.