El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se desligó de las muertes por coronavirus y la crisis económica en su país y acusó a los gobernadores e intendentes de ser los responsables, por haber instalado medidas como cuarentenas y distanciamiento social con cierre de comercios.
Mientras, Brasil superó en muertes a China, epicentro de la pandemia. Según el Ministerio de Salud, los infectados a nivel nacional alcanzaron los 78.162 y los muertos los 5466.
![Jair Bolsonaro (Andres Borges/Bloomberg)](https://viapais.com.ar/resizer/8g05RQtDzzekZtC5p9X0c4hif7o=/1023x684/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/MNSTSOBXGBTDEZBVMU4WIOBZGQ.jpg)
En este contexto, pese al dramático escenario que describen estas cifras, Bolsonaro profundizó la crisis política.
"Las medidas restrictivas fueron obra de gobernadores e intendentes. La prensa tiene que preguntarle al gobernador de San Pablo, Joao Doria, por ejemplo, por qué hay más gente muriendo en su estado", lanzó el presidente.
![Empleados cargan un ataúd en el cementerio de Vila Formosa en Sao Paulo, que tiene cerca de 46 millones de habitantes y 24.041 casos confirmados (EFE/FERNANDO BIZERRA JR)](https://viapais.com.ar/resizer/nxkwDfc8ryt6dW2upLuAoIpEfmY=/1023x682/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/GI2GENZYGA2GGZJWGU2WKYLBMQ.jpg)
Bolsonaro hizo el comentario luego de reunirse con diputados en el Palacio de la Alvorada, acusando a la prensa de haber destacado una declaración del martes por la noche que dio vuelta el mundo: "¿Y a mí, qué? Lo lamento. ¿Qué quieren que haga? Soy Messias, pero no hago milagros", en referencia a su segundo nombre que, efectivamente, es Messias.
El presidente, quien desde un principio consideró a la pandemia como "una gripecita", articuló sus respuestas y acusaciones en medio de un brote dela enfermedad que no para de expandirse en el país que él lidera.