El gobernador de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezao, fue detenido este jueves acusado de recibir millonarios sobornos ligados al esquema de corrupción Lava Jato y de integrar una organización que desvió dinero público al extranjero.
![El momento de la detención del gobernador de Río de Janeiro. Foto: AP.](https://viapais.com.ar/resizer/ADS64d7pggzH2iSEPR22PGWoeqM=/1023x682/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/MZTDKMZXGY3TQY3EMMZDOZBWG4.jpg)
Pezao, de 63 años, fue detenido esta mañana en la residencia oficial, en el Palacio Laranjeiras, y prestó declaraciones durante más de tres horas en la sede de la Policía Federal (PF). Escoltado por agentes policiales y sin esposas, fue trasladado luego a una prisión de la Policía Militar en Niterói, región metropolitana de Río, donde permanecerá recluido en una sala especial, sin rejas ni otras características de una celda común.
![Luiz Fernando Pezao fue escoltado por agentes policiales y sin esposas. Foto: EFE.](https://viapais.com.ar/resizer/EOkXDQZ9KPbQ6zaa4GkWMMv5edw=/1023x724/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/G5TDIOJYHE3TGOJTGI3DEMBQG4.jpg)
"De acuerdo con las investigaciones (...) el gobernador integra el núcleo político de una organización criminal que, a lo largo de los últimos años, cometió varios crímenes contra la administración pública, especialmente corrupción y lavado de dinero", dice una nota de la Fiscalía General sobre la operación apodada "Boca de Lobo".
El mandatario está acusado de recibir sobornos entre 2007 y 2014, cuando era vicegobernador de su aliado Sergio Cabral, quien está preso por cargos de corrupción. Los pagos se habrían extendido hasta 2015, cuando ya era gobernador, afirmó la Fiscalía.
![Pezao está acusado de recibir sobornos entre 2007 y 2014. Foto: AFP.](https://viapais.com.ar/resizer/3_Buh1SQHO0t8DUnlXV5fut1Avs=/1023x720/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/GU2GMNJVMZTGENZYGRQTGNJUGQ.jpg)
La orden de prisión fue solicitada por la Fiscal General de Brasil, Raquel Dodge, y se sustenta en peritajes contables y en la confesión de Carlos Miranda, un operador financiero de Cabral.
Según Miranda, Pezao habría recibido de empresas y proveedores contratados por el gobierno de Rio de Janeiro una mensualidad de 150.000 reales (unos 40.000 dólares al cambio actual), además de un bono por 1 millón de reales (unos 263.000 dólares).
La detención se produce a un mes de culminar su mandato. La fiscal Dodge, en una inusual rueda de prensa tras la detención, subrayó que era necesaria puesto que incluso después apresamientos e investigaciones, "los crímenes se perpetuaron (...) por las informaciones que tenemos, esto [lavado de dinero] continúa, aún está ocurriendo".