Sasha, hija de Alberto Samid: "A los nueve años tuve mi primera carnicería"

Sasha, una de las hijas del empresario Alberto Samid, dijo que no sabe si las acusaciones de evasión impositiva contra su padre tienen fundamento y contó que trabaja en carnicerías de la firma La Lonja desde los 9 años.

"No tengo idea si es cierto", dijo esta mañana Sasha, de 23 años, en declaraciones a Radio Con Vos, en referencia a la causa que la AFIP le inició a su padre por evasión impositiva. "No estoy en ninguna causa de las que investigan a mi papá", aclaró.

"Yo creo que tiene mucho para hablar. No tengo idea qué pero sé que tiene mucho para decir", agregó.

Según contó Sasha, "a los nueve años tuve mi primera carnicería la Lonja". En total son seis hermanos y todos trabajan en el rubro. "Yo estudiaba en el colegio e iba a la caja de la carnicería", admitió sobre su labor en un local donde también trabajaba su mamá. Y agregó que "por lo menos en las carnicerías que tuve yo", siempre entregaron el ticket fiscal con las compras.

"Es un momento feo, [estamos] esperando que llegue mi papá y se pueda solucionar todo", concluyó Sasha.

Samid fue detenido en Belice y deportado, luego de que el tribunal oral que lo juzga por supuesta asociación ilícita y evasión ordenó su captura por faltar a dos audiencias del debate.

La decisión fue del Tribunal Oral en lo Penal Económico 1 luego de que Samid se ausentara a la audiencia fijada para el miércoles pasado. En una audiencia previa, el fiscal del juicio, Gabriel Perez Barberá, pidió una condena de seis años y medio de prisión.

El empresario de la carne es juzgado por supuesta asociación ilícita, sobre la base de una investigación abierta en 1996 por evasión impositiva en sus frigoríficos.

Además del empresario, son juzgados su hermana Alicia y otros acusados de integrar una asociación ilícita que cometió maniobras delictivas para evadir el pago del Impuesto al Valor Agregado en la venta de carne en los frigoríficos.

En la acusación inicial había otros delitos, pero todos prescribieron por el paso del tiempo, ante la demora en iniciarse el debate.