Los ingresos familiares perdieron poder adquisitivo por paliza frente a la inflación en el último año

En 2020, crecieron 19,6%, cuando la inflación fue del 36,1%. La ayuda estatal fue un paliativo para los sectores de ingresos bajos, que evitó un aumento de la desigualdad. Se perdieron 756.000 empleos asalariados sólo en los grandes aglomerados urbanos.

Los ingresos familiares perdieron poder adquisitivo por paliza frente a la inflación en el último año
Los ingresos familiares perdieron poder adquisitivo por paliza frente a la inflación en el último año

Los ingresos de las familias argentinas se derrumbaron durante 2020, el año de la pandemia, dado que registraron un alza nominal del 19,6%, cuando la inflación del período fue del 36,1%, según datos oficiales difundidos este miércoles.

Si bien el indicador de pobreza aumentó fuerte en 2020, la desigualdad mostró una leve disminución de ese año debido al impacto transversal de la crisis económica y a que lo recursos del Estado apuntaron a contener a los sectores sociales más humildes.

Así lo señaló el índice de Evolución de la distribución del ingreso (EPH) del Indec. El mismo indica que el cociente de Gini del ingreso per cápita familiar de las personas fue de 0,435 en el cuarto trimestre de 2020.

Ese indicador estuvo por debajo el 0,439 del cuarto trimestre de 2019. Cuando este porcentaje más se acerca a cero, es porque hay un menor nivel de desigualdad; y cuando sube, porque la situación empeora.

La suma total de ingresos de los hogares argentinos creció 19,6% en relación con igual trimestre de 2019; los ingresos laborales crecieron 18,2% y los no laborales, 23,2%.

(DYN).
(DYN).

Los ingresos no laborales son jubilaciones, pensiones, alquileres, cuotas de alimentos o ayudas de dinero de otros hogares, subsidios y otro tipo de asistencia social del Estado, en cualquiera de sus niveles.

En esos datos se plasmó el impacto de la ayuda social que dieron los Estados nacional, provinciales y municipales, con un nivel de gasto público récord que ha profundizado el déficit fiscal del Sector Público Nacional.

El ingreso promedio per cápita del total de la población, que corresponde a 28.739.630 personas que viven en los 31 aglomerados urbanos relevados por el Indec, alcanzó los 19.524 pesos.

El informe oficial dice que el 58,6% de la población total relevada (16.836.669 personas) percibió algún ingreso en el último trimestre de 2020, cuyo promedio fue igual a $33.306.

Analizado según escala de ingreso individual, el ingreso promedio del estrato bajo equivalió a $12.150; el del estrato medio, a $31.766; y el del estrato alto, a $78.723.

El Indec volvió a mostrar la brecha de género que hay en los ingresos: los perceptores varones tuvieron un ingreso promedio de $37.910 en el último trimestre de 2020, 31% más que los 28.937 de las mujeres.

Los asalariados

Se registraron 7.943.398 personas asalariadas con ingreso promedio de $36.246 en el tercer trimestre, lo cual implica un aumento interanual de 32,4%, también muy por debajo de la inflación general.

El ingreso promedio de las personas asalariadas con descuento jubilatorio fue de $44.613 (+30,3% interanual), mientras que en el caso de aquellas sin descuento jubilatorio, el ingreso promedio equivalió a $18.676 (+27,9% interanual).

Respecto al cuarto trimestre de 2019, se observó una caída de 469.122 personas asalariadas con ingresos sin descuento y de 286.976 en aquellas que perciben ingresos con descuento. Eso hace que el universo de asalariados haya perdido 756.098 trabajadores en 2020.