Bolivia: tras su detención, Jeanine Áñez pidió ayuda a la OEA y a la UE y espera a ser interrogada

La expresidenta de facto considera que está sufriendo una “persecución política aberrante”. En sus cartas, solicitó el envío de misiones para analizar objetivamente su situación.

Jeanine Anez (AP Photo/Juan Karita)
Jeanine Anez (AP Photo/Juan Karita)

La expresidenta de facto boliviana Jeanine Áñez pasó una primera noche tras las rejas mientras se espera que sea interrogada por la Fiscalía general luego de su detención por su participación en el golpe de Estado contra el exmandatario Evo Morales en 2019.

“Se me acusa de terrorismo, sedición y conspiración para materializar un supuesto golpe de Estado. No obstante, la institución a la que usted representa ha sido testigo de un fraude en las pasadas elecciones del año 2019, motivo por el cual el pueblo boliviano salió a las calles a reclamar y exigir el respeto a su voto”, escribió la expresidenta de facto de Bolivia Jeanine Áñez, en su carta al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.

Áñez se encuentra detenida en la sede de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de la Policía boliviana. Acusada de sedición y terrorismo solicitó a la OEA y la Unión Europea que envíen misiones oficiales, al argumentar que ella y varios de sus ministros son “víctima de una persecución política”.

Además de a Almagro, le envió cartas al embajador de la Unión Europea en La Paz, Michael Dóczy Áñez. En las misivas, denuncia las acciones “perpetradas por el Gobierno del Movimiento Al Socialismo” y la “sistemática vulneración de los derechos humanos en Bolivia mediante una persecución política aberrante”.

El diario Página Siete detalló que el pedido alude a la Carta Democrática Interamericana y por eso sugiere la llegada de una Misión Oficial de Observación con el fin de evaluar “de manera objetiva e imparcial la ilegal aprehensión” de la que se considera víctima.

El pedido a la OEA resulta casi una afrenta para el Ejecutivo de Luis Arce, dado que fue la organización continental la que hizo público un informe que hablaba de fraude tras las elecciones presidenciales del 2019, y que sirvieron de base a militares y policías para exigir entonces la salida del cargo de Evo Morales.

Las relaciones de Bolivia y la OEA están virtualmente congeladas, al punto que en los comicios regionales de hace dos semanas Arce no fue a abrir la jornada justamente en repudio a la presencia de la misión de observadores de la organización.

Con información de Télam.