Dictaron prisión preventiva para los tres policías imputados en el caso de Lucas González

El juez Del Viso consideró que procedieron de forma “arbitraria, irracional e ilegal” y que luego “urdieron una trama para tergiversar los hechos”.

Los dos autos utilizados para la reconstrucción del ataque a balazos a Lucas González y sus amigos. Foto: Luciano Thieberger.
Los dos autos utilizados para la reconstrucción del ataque a balazos a Lucas González y sus amigos. Foto: Luciano Thieberger. Foto: Crimen de Lucas González

Los tres policías de la Ciudad imputados por el crimen de Lucas González, el adolescente de 17 años asesinado a balazos el 17 de noviembre último en el barrio porteño de Barracas, fueron procesados este lunes con prisión preventiva por considerar que procedieron de forma “arbitraria, irracional e ilegal” y que luego “urdieron una trama para tergiversar los hechos”.

La resolución del juez de Instrucción Martín Del Viso recayó sobre los efectivos Juan José Nieva, Fabián López y Gabriel Issasi, a quienes también les trabó un embargo de 1.800.000 pesos sobre sus bienes a cada uno.

“Es histórico. Hace dos semanas era un enfrentamiento, los pibes estaban presos y los policías libres. No salen más”, dijo a Télam el abogado Gregorio Dalbón.

La policía se hizo presente en el hospital y descubrió que el herido tenía antecedentes penales.
La policía se hizo presente en el hospital y descubrió que el herido tenía antecedentes penales. Foto: Luciano

El fallo del juez

Según el fallo, el magistrado los procesó por el homicidio doblemente agravado de Lucas “por haber mediado alevosía y por haber sido cometido por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones”, en concurso ideal con la “tentativa de homicidio agravado por idénticos incisos” de los tres amigos que iban con el adolescente al momento del ataque.

Para el juez, la persecución que terminó con el ataque a balazos fue “arbitraria, irracional e ilegal”.

El magistrado hizo “especial hincapié en que se han despejado todo tipo de dudas” respecto a que las víctimas “no contaban con ningún elemento relacionado con un arma de fuego, ni con un elemento contundente que le hubiera permitido al personal policial suponer que podían atentar contra su integridad física”.

“Incluso, se habría plantado la réplica de un arma para intentar dar cobijo legal a su ataque”, señaló Del Viso.

A su vez, el magistrado basó su decisión de que los tres policías continúen detenidos por entender que existen riesgos procesales de fuga y de entorpecimiento de la investigación.

En tanto, la pesquisa continúa con la realización de una serie de peritajes, entre ellos, el análisis de las comunicaciones mantenidas a través de ocho teléfonos celulares, de las imágenes de una cámara de seguridad colocada en una esquina de Barracas y la reconstrucción del hecho.

Por el caso, hay otros seis efectivos de la Policía de la Ciudad que están detenidos e imputados de “falsedad ideológica, privación ilegal de la libertad agravada, encubrimiento agravado, amenazas y odio racial”.

Se trata de los comisarios Juan Romero y Fabián Du Santos, el subcomisario Roberto Inca, el principal Héctor Cuevas y las oficiales Micaela Fariña y Lorena Miño.

Con información de Télam