Tras el éxito de “Mixto”, Hernán y Nahuel, del grupo Hipnótica, ya trabajan en temas nuevos

Sencillez, transparencia, emociones a flor de piel y mucho amor por la música: estas cuatro características describen bien al grupo Hipnótica que, tras haber presentado “Mixto”, su cuarto disco, en el Teatro Vorterix, encara el año con proyectos y, por supuesto, con muchas letras en mente. “Siempre estamos haciendo música”, afirman Nahuel Barbero y Hernán Ortiz, en diálogo con Vía País.

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-Felicitaciones por tremendo show en Vorterix. Se notó que lo disfrutaron mucho.

Hernán: Qué bueno, muchas gracias por tus palabras. Fue alto sueño para nosotros tocar en ese lugar con esas condiciones, poder hacer un show absolutamente nuestro, pasar por todo el repertorio de la banda. Creemos que eso se pudo transmitir a la gente y fue una hermosa experiencia.

-Empezaron el año con todo.

Nahuel: Sí sí, muy arriba. Fue una seguidilla de shows. Estuvimos en Vorterix, en Cosquín, Uruguay, después volvimos y tocamos en Alta Gracia en un festival, en un show re lindo, en un evento re bonito en La Cumbre. Así que a partir de febrero estamos bastante activos, empezó el año con todo.

-En Vorterix, se notaba que agradecían todo el tiempo y que realmente era muy genuino. ¿Qué era lo que estaban agradeciendo puntualmente?

Hernán: Yo siento que, en principio, estábamos muy agradecidos con la oportunidad de presentarnos en semejante lugar con esas condiciones técnicas a nivel laboral. Por un lado fue un mimo hacer el trabajo para el que uno rema y se prepara tanto tiempo. Pero además siento que estamos agradecidos de que la gente acompañó: la gente que vino al show, estaba la prensa, gente de la industria, colegas que admiramos mucho; el público que se merece, después de tantos años de la banda, vernos en ese lugar; y todo eso completó el círculo. Estábamos en ese mood de sueño.

Nahuel: Yo creo que, igual, también era agradecer el momento. Un agradecimiento general a todas las partes que conviven y se conjugaron para que viviéramos el momento que fue muy especial y un show particular. Transmitir a través del agradecimiento que fue distinto y para nosotros un momento lindo. Ojalá que en algún punto bisagra de nuestra relación banda-Buenos Aires, que es un objetivo que tenemos después de este disco y de esta etapa actual del grupo, hacer un poco más de pie en Capital Federal, y el show en Vorterix fue el primer paso. Un montón de cosas internas que se conjugan, salieron bien y se traducen en agradecer.

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-Hernán, en un momento, terminaste de cantar y mencionaste que, tiempo atrás, estabas atravesando una tristeza en Buenos Aires y que te gustaba estar cantando en el teatro con toda la gente. ¿Qué sentiste?

Es como que todo Vorterix fue un momento muy alto a nivel emocional y había que hacer mucha fuerza y tener concentración en lo que uno tenía que hacer: cantar y tocar bien. Porque todo el tiempo estaba la emoción muy a flor de piel. Fue eso lo que estuvo todo el tiempo y por eso se vio esa transparencia. Era muy genuino. Representó un montón tocar en ese teatro. En esa instancia de Hipnótica, nunca nos imaginamos tocar ahí. Y recordé ese momento y pensé en voz alta.

-¿Imaginaban que Hipnótica iba a volar tan alto?

Nahuel: No, pero sí porque es lo que soñamos. A la hora de hacer música, cuando empezamos más chicos que soñamos con la fantasía de ser cantantes, vivir de la música y hacer nuestras canciones como modo de vida, sí soñamos con tocar en lugares gigantes y con que nuestra música trascienda. Pero en el camino eso ocupa un segundo plano y uno se enfoca más en la música en sí, en la obra, en lo que es uno como artista y persona, en ir evolucionando. Sin embargo, cuando estas cosas lindas pasan, uno se acuerda de mirar para atrás y… No sé si en algún momento lo pensamos tan real, y hoy le dedicamos a full al proyecto y superó nuestra expectativas. Todo lo que logramos es por mérito propio, la gente que fuimos conociendo en el camino y que se copó con nosotros, siempre fue por la obra entonces nos enfocamos en que eso siga siendo así.

-¿Qué significa “Mixto” en su trayectoria?

Hernán: Un montón, un salto de calidad altísimo a nivel interno, y de afuera también se vio y se sintió. Una declaración de “acá estamos”. Acá estamos hace 12 años escribiendo canciones y podemos pelar un disco de alto vuelo, que sea heterogéneo, que no responda tendencias de nada, que conviva con todo lo que sucede y suene actual. Siento que realmente, personalmente amé cada uno de los proyectos y todos fueron una enseñanza, un gran paso hacia adelante, pero “Mixto” fue, al menos a nivel interno, la consolidación del proyecto.

Nahuel: La confirmación. Para nosotros y para mucha gente también del público. En los tiempos que corren no es nada simple mantener un proyecto tantos años ni sacar un cuarto disco de estudio ni que se viva con el mismo entusiasmo del primero. “Mixto” confirma muchas cosas a nivel artístico y personal, y la misión de la industria. Es una confirmación.

Con una calma que los caracteriza, Nahuel y Hernán ya están preparados y motivados para lo que viene. “Sin prisa pero sin pausa”, dice el refrán. Y es que, sin presiones y con mucha complicidad, continúan con su habitual ejercicio, y el que más les gusta: componer música que fluye desde adentro y que llega hasta lo más profundo. A propósito: “No hay más que hacer más que fluir”, indica una de sus canciones.