Pérez llora por los Talleres Ferroviarios porque tiene miedo de perderlos

Habla Miguelo Valentini, Director de la Biblioteca y Museo “Padre Bernardo Longo”,

Coche pagador,  donde en las distintas ventanillas cobraban los obreros ferroviarios de las distintas secciones (Miguelo Valentini)
Coche pagador, donde en las distintas ventanillas cobraban los obreros ferroviarios de las distintas secciones (Miguelo Valentini)

Miguelo Valentini, es Director de la Biblioteca y Museo “Padre Bernardo Longo”, la cual contiene, entre otras reliquias, objetos y archivos ferroviarios que son patrimonio histórico de la ciudad de Pérez. Hace ya 23 años que dicha sala de exposiciones permite a sus visitantes acercarse a buena parte de la historia de la ciudad, porque si hay algo que Miguelo aprendió en el seno de su hogar, tanto por parte de sus abuelos como de sus padres, es que en la vida lo único que a uno lo puede salvar, es la educación.

“Estaban contentos en mi familia con la idea de poner una biblioteca, porque iba a ser un regalo para la ciudad”, comentó Miguelo feliz de poder dialogar sobre estos temas que forman parte de la esencia de lo que somos, porque es la historia de quienes nos precedieron, es nuestra identidad.

Miguelo Valentini (Facebook)
Miguelo Valentini (Facebook)

En la biblioteca hay objetos y documentos de gran valor en cuanto se refiere a los talleres ferroviarios: manuales escritos en inglés, fichas de muchos empleados ferroviarios, planos de la locomotora original 196, cuadros muy buenos con las fotos de esa época, la revista La Pluma, de José Palomeque, etc.

Lo impactante es que Miguelo durante largos años y con mucha paciencia, fue consiguiendo que esas reliquias no se perdieran o se desecharan. Algunos documentos fueron rescatados de la oficina, porque los iban a tirar: “yo lo mandé a encuadernar, porque es un regalo para la comunidad tener esas reliquias. Tengo también los planos de las estaciones del ferrocarril de Buenos Aires. Me gusta que la gente lo disfrute”, remarcó.

Gente de Europa, Italia y Estados Unidos vinieron a visitar la Biblioteca para estudiar lo referente al ferrocarril porque la parte teórica está documentada en esos papeles. “Tengo unos informes de los años 1920 y 1930 que son del taller de Chicago y que me trajeron como regalo en agradecimiento cuando vinieron de Estados Unidos para hacer un estudio del ferrocarril de Pérez. También la misma gente del ferrocarril, cuando todavía funcionaba la cooperativa, enviaron objetos a la biblioteca”, explicó Miguelo.

Patrimonio de la ciudad de Pérez

Otros objetos de valor que ya forman parte del patrimonio perecino es el reloj que estaba en el comedor del ferrocarril: el primer reloj de pared colgado. “Me llamó la gente de la cooperativa y me dijeron que si no iba a buscarlo se lo levaría un chatarrero. Fuimos con la gente de la Epe, una escalera larga y lo trajimos. Cuando vino la Directora de La Cultural de Rosario, sugirió mandarlo al Museo de Londres y poner una placa, y yo le dije que no porque era patrimonio de la ciudad. Si no se hubiera rescatado, lo perdíamos”, aclaró.

Primer reloj del taller ferroviario de Pérez y estaba en el salón comedor.  Por turno comían más o menos 1000 personas (Miguelo Valentini)
Primer reloj del taller ferroviario de Pérez y estaba en el salón comedor. Por turno comían más o menos 1000 personas (Miguelo Valentini)

“El museo nuevo, no va a ser la historia de Pérez”

“A mi no me dijeron nada y no sé nada, pero sabemos que el ferrocarril nace en 1914 y todos esos terrenos como los que están alrededor de la estación, son nacionales. En el año 1993 se cierran definitivamente los talleres de Pérez y la reactivación del ferrocarril está muy bien. Después viene la cooperativa ferroviaria que deja de funcionar en el 2008. Ahora yo me pregunto: ¿de quiénes son esos talleres?, porque nadie sabe nada”, dijo Miguelo con verdadera preocupación.

Revista La Pluma ferroviaria. Un ejemplar del año 1934 (Miguelo Valentini)
Revista La Pluma ferroviaria. Un ejemplar del año 1934 (Miguelo Valentini)

“Cuando se cierra definitivamente la cooperativa, se hicieron algunos trámites para que el Club Mitre pueda adquirir una porción de esos terrenos, que actualmente son de su propiedad y me parece muy bien porque queda para la ciudad. Yo pregunto, ¿la ciudad de Pérez quedará con algo de todo ese predio?. ¿Qué pasa con los talleres?. ¿Habrá una letra chica que diga que ninguna empresa puede tumbar eso?, volvió a remarcar el Director de la Biblioteca. La pregunta queda en suspenso, pero la nostalgia y preocupación vuelven a reflotar en la memoria: “sería un despecho muy grande para la ciudad, porque en ningún lado del mundo se puede tocar algo que forma parte del patrimonio”.

“Estoy preocupado porque nadie te dice nada y yo no lo sé”

Miguelo quiere remarcar que “si el Club Mitre en su momento pudo hacer algo para recuperar esos terrenos, ¿no se puede hacer nada ahora?. Yo tengo miedo que me tumben esas oficinas. También me echo la culpa porque quizá no me preocupé demasiado”, señaló.

El nuevo Museo Histórico

“Si yo tengo que analizar el hecho de que vamos a hacer el museo ferroviario en un predio también nacional, donde además tendremos que sacarle espacio verde a la ciudad: ¿no es mejor hacerlo en el lugar original?. Lo llevamos a otro sitio porque nos corrieron de los talleres. El patrimonio histórico de nuestra ciudad y de la República Argentina está en ese lugar. Los objetos de la Biblioteca y Museo “Padre Bernardo Longo, son las reliquias más bonitas de nuestro país y ya está todo reservado como patrimonio de la ciudad”, finalizó Miguelo.