Clásico rosarino: Newell’s mostró desde adentro el festejo final en el Gigante

El entrenador Javier Sanguinetti y los futbolistas celebraron en la cancha de Rosario Central luego del triunfo.

El plantel de Newell's estalló de alegría en el vestuario de la cancha de Rosario Central.
El plantel de Newell's estalló de alegría en el vestuario de la cancha de Rosario Central. Foto: Newell's Old Boys

Mientras en las calles de la ciudad se multiplicaban los bocinazos y los gritos, el plantel y el cuerpo técnico de Newell’s cantaron victoria este domingo en la cancha de Rosario Central. Después de la victoria en el clásico rosarino, el club mostró el festejo en el Gigante de Arroyito desde adentro, mientras sus hinchas celebraban a la distancia.

Tal como ocurrió la última vez que la Lepra venció a los canallas, los futbolistas se adueñaron del campo de juego visitante por unos minutos. El entrenador Javier Sanguinetti se abrazó con sus colaboradores y también emprendió la carrera hacia el centro de la cancha en medio de la alegría rojinegra.

El “Archu” salió victorioso de su primer clásico rosarino y no se privó del festejo con los jugadores. Ni bien se escuchó el silbatazo final del árbitro Pablo Echavarría, el grupo se alejó del banco de suplentes y empezaron a abrazarse entre sí ante un resultado que Newell’s no obtenía desde hace más de cinco años.

El delantero Juan Manuel García fue uno de los grandes protagonistas de la victoria leprosa y se metió de lleno en la celebración. Por otra parte, Pablo Pérez ocupó el centro de la ronda y sus compañeros lo levantaron por encima de sus cabezas mientras cantaban.

El clima en el Gigante de Arroyito no era amable y se multiplicaron las críticas hacia el entrenador canalla Cristian González. No obstante, la delegación de Newell’s se retiró hacia el vestuario y luego se fueron del estadio sin incidentes graves después del partido.