Un vecino de la capital puntana advirtió sobre el estado de un cableado eléctrico

"Es muy peligroso. Inclusive si uno saca la mano por la ventana, sin estirarla demasiado, los puede tocar y quedarse pegado" aseguró. 

Roberto Demarco no puede seguir construyendo por el mal estado del cableado eléctrico.
Roberto Demarco no puede seguir construyendo por el mal estado del cableado eléctrico.

Ricardo Demarco es un vecino de la capital puntana y denunció públicamente que por la ventana de su casa, que está en reparación, pasa un cableado eléctrico en mal estado, prácticamente pegado a su propiedad por lo que teme por su seguridad y la de los obreros que están trabajando ahí.

"Está prácticamente pegado a la pared, cuando lo correcto sería que esté sobre la línea del cordón. Es evidente que es una instalación muy antigua, calculo que como mínimo tiene 50 años porque los cables no están trenzados ni forrados, el acero está a la intemperie", detalló Demarco a El Diario de la República.

Aseguró que la obra está paralizada hace unos ocho meses porque el cableado, que pasa a la altura de la segunda planta, hace imposible que los obreros trabajen, ya que pueden electrocutarse. Incluso Demarco puso caños de PVC por seguridad.

El hombre explicó que ya informó a Edesal, la empresa de energía puntana, pero nunca recibió una solución. En el reclamo del mes de julio solicitó que "que se separe de su fachada el cableado para poder realizar trabajos de construcción, aunque sea de forma provisoria".

Roberto Demarco no puede seguir construyendo por el mal estado del cableado eléctrico.
Roberto Demarco no puede seguir construyendo por el mal estado del cableado eléctrico.

Luego de mucha insistencia le respondieron en agosto: "Informamos que de acuerdo a la inspección realizada por nuestro personal técnico, la línea a la que usted hace referencia se encuentra bien ubicada sobre línea municipal, colocada anteriormente a la construcción por usted realizada y la cual no invade la propiedad" y añadieron que pueden hacerse modificaciones si el propietario lo desea.

El problema de Demarco es que por el estado de los cables, que "están pelados" el no puede hacer ninguna modificación. "Fueron seis personas a inspeccionar, entre ingenieros, técnicos y operarios, todos coincidieron en que hay que cambiar la línea. No tengo problema en hacer las modificaciones necesarias, como me respondieron en la nota, pero si los cables están pelados es imposible porque es muy peligroso tocarlos. Inclusive si uno saca la mano por la ventana, sin estirarla demasiado, los puede tocar y quedarse pegado", reclamó.