A casi dos meses del asesinato de Lucio Dupuy, el abuelo se tatuó su cara en el pecho

Faltan pocos días para que se cumpla otro aniversario por el crimen del menor asesinado a golpes en La Pampa. Para homenajearlo, su abuelo se tatuó su rostro en el pecho y la emotiva imagen se hizo viral.

A casi dos meses de la muerte de Lucio Dupuy, su abuelo se tatuó la cara del pequeño en el pecho para homenajearlo.
A casi dos meses de la muerte de Lucio Dupuy, su abuelo se tatuó la cara del pequeño en el pecho para homenajearlo.

A pocos días de cumplirse dos meses del brutal asesinato de Lucio Dupuy, el nene de cinco años de La Pampa, por el cual están detenidas como principales sospechosas del homicidio, su madre Magdalena Espósito Valenti y su pareja Abigail Páez. El padre del menor publicó en sus redes sociales una emotiva foto del abuelo del pequeño.

“Tu abuelo quería llevarte en la piel”, escribió junto a la fotografía en la que se ve a Ramón “Teto” Dupuy, tatuándose el rostro de su nieto en el pecho. La imagen se viralizó rápidamente y provocó una gran cantidad de reacciones y mensajes en apoyo a los familiares de la víctima.

El abuelo de Lucio Dupuy se tatuó la cara de su nieto en el pecho.
El abuelo de Lucio Dupuy se tatuó la cara de su nieto en el pecho. Foto: Mejor Informando

La investigación por el crimen de Lucio Dupuy

Hace algunos días, la Justicia de La Pampa ordenó nuevos peritajes psiquiátricos y psicológicos a Magdalena Espósito Valenti, madre del menor y su pareja, Abigail Páez, para determinar si existían antecedentes de violencia familiar tanto en las acusadas como en la relación de éstas con la víctima.

La policía detuvo a dos mujeres: Magdalena Espósito Valenti, la madre del niño de 24 años, y su pareja Abigail Páez de 27.
La policía detuvo a dos mujeres: Magdalena Espósito Valenti, la madre del niño de 24 años, y su pareja Abigail Páez de 27.

Los peritos también buscarán indicios de violencia en el modo de vinculación con el menor, la relación de cada una de ellas con la figura masculina, cómo era la rutina de los tres, qué les molestaba o enojaba del comportamiento del niño, entre otros aspectos.

La autopsia que le realizaron al cuerpo del pequeño determinó que Lucio murió por “múltiples golpes” y, además, se comprobó que tenía marcas de mordeduras, quemaduras de cigarrillo previas al hecho y signos de haber sido abusado sexualmente.