Netflix: la miniserie de tan solo tres episodios sobre un crimen real

Una gran opción para los amantes del suspenso. Una historia que se posiciona como una de las preferidas dentro de la famosa plataforma de streaming.

Pesadilla de un secuestro en California, la nueva serie de Netflix.
Pesadilla de un secuestro en California, la nueva serie de Netflix. Foto: Netflix

Netflix ha logrado posicionarse a lo largo de los años como el sitio predilecto para ver series y películas. No caben dudas de que allí se pueden encontrar grandes títulos, que permiten pasar un buen momento en soledad, con amigos, en pareja o en familia.

Son muchas las opciones que la plataforma de streaming ofrece; desde intensos melodramas, pasando por hilarantes comedias hasta dramáticos documentales donde el suspenso no cesa. Claro ejemplo de ello es Pesadilla de un secuestro en California, la nueva miniserie que está dando de qué hablar entre los usuarios.

Pesadilla de un secuestro en California, la nueva serie de Netflix.
Pesadilla de un secuestro en California, la nueva serie de Netflix. Foto: Netflix

Se trata de una docuserie que ha logrado posicionarse dentro del top 10 del servicio de streaming, dado que desborda de suspenso y tiene una duración de tan solo tres episodios, ideal para maratonear durante el fin de semana o disfrutar en la semana luego de una extensa jornada laboral.

¿De qué trata Pesadilla de un secuestro en California?

En 2015, el tranquilo vecindario de Vallejo, California, se vio sacudido por un perturbador incidente. Un intruso ingresó a la casa de Denise Huskins y su novio, Aaron Quinn, drogándolos y secuestrándola a ella, mientras exigía un rescate a él. Sin embargo, lo que podría haber sido un caso de secuestro convencional tomó un giro inesperado cuando las autoridades policiales comenzaron a cuestionar la versión de los hechos presentada por el hombre de la pareja.

Pesadilla de un secuestro en California, miniserie disponible en Netflix.
Pesadilla de un secuestro en California, miniserie disponible en Netflix. Foto: Netflix

La policía, en lugar de aceptar la historia del secuestro, consideró a Quinn como el principal sospechoso de la desaparición de su novia. Sostenían la teoría de que había asesinado a Huskins y fabricado la historia del secuestro para encubrir sus acciones. Esta incredulidad hacia la víctima plantea interrogantes sobre la confianza en el testimonio de quienes sufren situaciones traumáticas.

Sin embargo, la historia cobra un giro inesperado que se puede ver a lo largo de los tres episodios de la serie. Una gran opción para los fans del suspenso y la criminología.