La historia de la Rosca de Reyes y por qué se come cada 6 de enero

La rosca de Reyes es un pan dulce con forma de aro que se consume especialmente en España y México, entre otros países latinoamericanos cada 6 de enero. Desde hace año la tradición se instaló en la Argentina y se consume para celebrar la llegada de los Reyes Magos.

El secreto de Paulina Cocina para hacer la mejor Rosca de Reyes

Una preparación que puede ser rellena con crema pastelera, o dulce de leche en su versión más argenta, y en la que tradicionalmente se esconden algunas figuras para sorpresa de los más chicos.

El origen de la Rosca de Reyes

Existen varias versiones sobre el origen de este pan dulce. El más común se asocia a la creencia religiosa relacionada con la Epifanía, la visita de los Reyes Magos al niño Jesús y su entrega y adoración.

Temporada saludable: el boom de snacks bajas calorías en Mar del Plata

Tiene la forma ovalada porque representa el amor infinito: sin principio ni fin. También otra asociación más sencilla es que su forma se asemeja a la corona de los reyes.

Sin embargo, yendo a la tradición medieval, en Francia se solía elegir un rey para las fiestas. Se escondía una haba dentro de un pan dulce adornado de frutas y azúcar y al repartirlo, la persona que encontraba esa haba era el rey, en una proclamación simbólica.

Cómo hacer la Rosca de Reyes

La rosca de Reyes puede tener diferentes decoraciones. En este caso, compartimos una receta sencilla, que permite dejar volar la imaginación en cuanto a la decoración.

Ingredientes:

• 500 gramos de harina de trigo
• 10 gramos de sal
• 125 gramos de azúcar
• 100 gramos de leche en polvo
• 10 gramos de levadura seca
• 2 limones
• 1 naranja
• 3 huevos
• 150 cc de leche
• 150 gramos de manteca.

Preparación:

1. Mezclar la harina con la sal, azúcar, leche en polvo y levadura. Perfumar con ralladura de limón y naranja. Hidratar la masa con huevos y leche. Amasar.
2. Incorporar la manteca. Amasar nuevamente hasta obtener una masa lisa y elástica.
3. Dejar fermentar el bollo obtenido por una hora en un lugar cálido y tapada con un lienzo.
4. Estirar la masa. Colocar alguna figura para sorprender a los niños (opcional) e inmediatamente dar forma de rollo largo para formar la rosca. Dejar el cierre boca abajo.
5. Dejar fermentar por 30 minutos sobre una placa para horno.
6. Pincelar la rosca con huevo y, si se desea, esparcir alrededor de la rosca trozos de fruta confitada y azúcar granulada. Hornear a 180°C por 30 minutos.