¿Cómo evitar el consumo excesivo de sal?

Consumo de sal - Semana Mundial de concientización
Consumo de sal - Semana Mundial de concientización Foto: Vía Gualeguaychú

En la semana de concientización sobre el consumo de sal, la Lic. en Nutrición Silvina Wanzenried (MP 065), Jefa del Servicio de Alimentación y Dietética del Hospital SAMCo “Dr. Jaime Ferré”, nos acerca una serie de consejos para reducir la ingesta de sodio en nuestra alimentación diaria y así mejorar nuestra calidad de vida.

En Argentina se estima que cada persona consume diariamente 12 gramos de sal mientras que lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud son 5 gramos como máximo. Este consumo excesivo provoca serios problemas para la salud, entre los que se destaca la hipertensión que produce una alteración en la estructura y el funcionamiento de las arterias de los riñones que hace que tengan menos irrigación sanguínea y progresivamente fallen en su función (insuficiencia renal crónica).

A su vez, el 85% de la población con falla renal crónica, como consecuencia, padece hipertensión arterial, lo que aumenta el riesgo de eventos cardiovasculares.

¿Cómo puedo prevenir la falla renal y contribuir a mi salud cardiovascular?

Controlando frecuentemente la presión arterial, la glucemia y el nivel de colesterol en sangre

Evitando fumar y consumir alcohol en exceso.

Haciendo ejercicio físico y manteniendo el peso adecuado.

Incluyendo en la alimentación diaria frutas y verduras preferentemente crudas con alto contenido en potasio y bajo en sodio, disminuyendo el consumo de grasas saturadas (las de origen animal) e incorporando cereales integrales y legumbres. Principalmente se propone evitar alimentos ultraprocesados, fiambres, snacks, caldos concentrados, enlatados, conservas, encurtidos, condimentos y aderezos.

Y se recomienda leer las etiquetas de estos productos (y de todos los envasados) antes de hacer las compras para elegir los alimentos de bajo contenido en sodio: aquellos que tienen menos de 100 mg de sodio cada 100 g de producto.

Es importante recordar que “sodio” NO es lo mismo que “sal”. Es decir que no es solamente la sal de cocina la que aporta sodio a nuestro organismo, sino que éste se puede encontrar también, oculto, en muchos otros alimentos.

¿Cómo puedo reemplazar la sal?

Una mezcla de hierbas y especias utilizadas sobre los alimentos puede lograr, solo a través del olfato, un cambio positivo en la actitud hacia la comida.

  • Para cada preparación hay consejos que nos pueden ayudar a reducir la sal agregada:
  • Para las carnes se puede utilizar mostaza en polvo, pimienta, aceite de oliva, albahaca, ajo, morrón, salsa criolla o chimichurri casero.
  • Para las pastas: hervirlas en agua sin sal pero con algún alimento o condimento que le de sabor (cebolla, ajo; pimienta negra, puerro, laurel). Servirlas con pesto, provenzal, romero o aceite de oliva.
  • Para las ensaladas: incluir cebolla de verdeo picada bien finita, pimienta, albahaca, limón, orégano, mostaza en polvo, aceto balsámico o frutas secas.

También es importante tener en cuenta que el horno, el microondas, la plancha y la parrilla conservan y realzan más los sabores que las cocciones al vapor o por hervor.

Por último la Lic. en Nutrición, Silvina Wanzenried destaca: “Reeducar a las papilas gustativas a comer sin sal, demanda entre 3 y 6 meses: es importante respetar este tiempo hasta reacostumbrar el gusto para poder disfrutar de esta forma de alimentación saludable”.

Esta campaña forma parte de los esfuerzos que realiza el hospital local por mejorar la calidad de vida de la población. En el área nutricional del SAMCo, esta campaña de concientización sobre el consumo de sal, se suma a otras iniciativas como la de los “Talleres de cocina para celíacos” que se realizará próximamente.