El clásico rosarino se demoró porque Jorge Broun sufrió un corte en la cara

En el marco de la fecha 10 de la Liga Profesional 2023, el clásico rosarino empezó más tarde de lo previsto este domingo en el Estadio Marcelo Bielsa. Apenas entró a la cancha de Newell’s, el arquero Jorge Broun sufrió un corte en la cara y los médicos del plantel auriazul tuvieron que atenderlo antes del partido.

Newell’s y Rosario Central igualaron en un clásico rosarino olvidable

El futbolista de Rosario Central y sus compañeros no la pasaron bien cuando pisaron el campo de juego del Coloso del Parque de la Independencia. De inmediato cayeron bombas de estruendo y en las tribunas encendieron otros artefactos de pirotecnia.

Antes de que los integrantes de ambos equipos pudieran saludarse, Pablo Echavarría recibió un llamado de atención. Cuando se acercó, vio que el arquero tenía sangre sobre el pómulo derecho por un corte vertical.

Violencia en el clásico rosarino: apedrearon el colectivo de Rosario Central

En ese momento, el doctor Hernán Giuria fue a revisar a Broun, que quería continuar con los últimos preparativos y empezar a jugar. El médico de Rosario Central le tapó la herida con un apósito y eso le permitió iniciar el partido sin problemas.

A partir de esta demora, el clásico rosarino empezó siete minutos más tarde. En su primera intervención, “Fatura” se tiró al piso sobre el sector derecho del área grande para agarrar la pelota y así confirmó que estaba en condiciones de disputar el duelo más importante de la ciudad.

¿Qué le pasó a Jorge Broun en el clásico rosarino?

Después del empate 0 a 0, Jorge Broun se fue conforme del Coloso, pero también quedó “aturdido” por un incidente previo al encuentro. El arquero reveló que le cayó una bomba de estruendo cuando estaba yendo hacia la cancha.

“Siento que me cae en el pecho y me explota. Decí que no me agarró el ojo”, comentó “Fatura” sobre lo que ocurrió fuera del campo de juego. Al futbolista le quedó una marca en la camiseta por el impacto del artefacto explosivo cuando salieron del vestuario.

Ni bien terminó el partido, Broun aseguró que “en todo momento” quiso jugar el clásico rosarino. Sólo le pidió tiempo al árbitro para recuperarse de la explosión. Finalizado el encuentro, todavía tenía los oídos aturdidos por la agresión.

El arquero destacó que terminó “tranquilo” por la actuación de Rosario Central. En cuanto a lo estrictamente futbolístico, le dijo a TNT Sports: “Tuvimos las más claras y no las pudimos meter”, manifestó.