El Gobierno emitió un comunicado sobre las pampeanas detenidas en San Luis

Las mujeres están acusadas de asesinar en La Pampa a un niño de 5 años tras una serie de agresiones y golpes. La mamá de Abel Lucio Dupuy y su pareja se encuentran en el Complejo Penitenciario I de la capital puntana.

Madre y pareja de Abel Lucio Dupuy
Madre y pareja de Abel Lucio Dupuy

Este lunes, el Gobierno de San Luis emitió un comunicado relacionado al asesinato a golpes de un niño de 5 años en La Pampa. En el mismo, se informa que Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez, la mamá del niño y su novia, se encuentran detenidas en la capital puntana.

Comunicado San Luis, caso Abel Lucio Dupuy
Comunicado San Luis, caso Abel Lucio Dupuy

Ambas se encuentran demoradas en el Complejo Penitenciario I de la ciudad de San Luis, donde quedaron aprehendidas por orden de la Justicia pampeana.

Abel Lucio Dupuy, niño de 5 años asesinado a golpes
Abel Lucio Dupuy, niño de 5 años asesinado a golpes

Esta medida, según se anunció, detalla que, como la provincia vecina no tiene un sistema penitenciario propio, las detenidas quedan a disposición de la Justicia, pero siendo demoradas en la Provincia de San Luis.

Esto sucede en el marco del Tratado del Caldén, firmado en el año 2017 entre las provincias involucradas.

El crimen de Lucio Dupuy

El pasado domingo 28 de noviembre, un nene de cinco años murió en La Pampa tras llegar a un hospital con golpes y agresiones de todo tipo.

Las principales acusadas por las heridas que propiciaron la muerte del chico fueron su madre biológica y su novia, que quedaron detenidas en San Luis.

El hecho ocurrió el sábado por la madrugada, cuando la madre, identificada como Magdalena Espósito Valiente (24 años), llevó al chico convulsionando a una sede policial. Allí le practicaron RCP e intentaron que llegue a un hospital para su atención. Pero el pequeño no resistió.

Comunicado del papá de Abel Lucio Dupuy
Comunicado del papá de Abel Lucio Dupuy

El padre denunció que pedía hace tiempo la tenencia de su hijo y había alertado sobre la situación: “La justicia nunca me escuchó”, sentenció.